Pues quizás tengan razón quienes me han dicho que era lo que esperaba de una película de Wolverine. Es muy cierto que no es EL CABALLERO OSCURO ni WATCHMEN, pero a pesar de la poca sustancia es una película entretenida... si su gusto es la acción sin son ni ton y muchos efectos especiales. Por que eso es X-MEN ORIGINS: WOLVERINE, acción sin pausa y un argumento flojo lleno de clichés.
A mi parecer, el tratar de explicar los origenes del personaje fue un vano intento de otorgarle ciertas características sensibileras que no posee en entregas anteriores de los X-Men (aunque en la tercera parte podemos ver algo de sentimentalismo en Wolverine). El que Wolverine decida formar parte del Proyecto Arma X (alerta spoiler, por si no la han visto) sólo por vengar a su amada es uno de los argumentos más empleados en el cine: la venganza. Pero no debería, según mi criterio, ser el motivo que impulsa al personaje a tomar tal decisión.
Se agradece la presentación de algunos personajes del universo Marvel de los X-Men como Gambito y Emma Frost, pero no es suficiente y no ayudan mucho a la película.
El filme de Wolverine daría pie a un Origen de Magneto, pero creo que deben pensarlo mucho mejor, aunque Magneto tiene mucho más para mostrar.
Este filme es para pasar un rato, disfrutar sus cotufas, caramelos y lo que se lo ocurra consumir en la sala y luego puede olvidarla con facilidad.
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